sábado, 17 de enero de 2009

LLEGARON LAS LLUVIAS



En mi modesta opinión "Llegaron las lluvias" (Clarence Brown, 1939) es un clásico de Hollywood realizado para el lucimiento de su elenco artístico, encabezado por la rutilante estrella Tyrone Power, en aquellos años el niño bonito de la Fox. Interpretó aquí al mayor Rama Safti, un oficial médico hindú de casta elevada al servicio del ejército inglés, responsable del hospital de Ranchipur (en la exótica India colonial). Como pareja protagonista le acompañó en esta aventura Mirna Loy, enigmática y cautivadora belleza, representando a la indolente Lady Edwina Esketh.

Completaron tan eficiente reparto el galán irlandés George Brent, encarnando al dipsómano pintor Tom Ransome, y la preciosa Brenda Joyce, más tarde la segunda de las Jane de la saga de Tarzán (tras la pelirroja Maureen O´Sullivan) protagonizada por el inolvidable Johnny Weismuller.



Brenda en brazos de Johnny



Esta película está basada en la novela original de Louis Bromfield, un snob y afamado escritor ganador del Pulitzer en 1927 por "Early Autumm", descendiente en persona de aquel mítico pionero norteamericano llamado Daniel Boone.

La llegada del monzón coincide con un devastador terremoto, provocando una terrible catástrofe que arrasa la ciudad. La destrucción de un embalse causa unas impresionantes inundaciones que engullen a la mayoría de los desdichados habitantes de la anegada Ranchipur. A este respecto, me gustaría destacar aquí los convincentes efectos especiales obra y arte del tándem Fred Sersen y Edmund H. Hansen, galardonados con un Óscar en 1940 por este trabajo.

Las letanías de los santones hindúes implorando el final de la cólera de sus dioses contrasta con la serenidad demostrada por la viuda Maharani de Ranchipur (Maria Oupenskaya), una fumadora empedernida que exhorta a los súbditos supervivientes para que combatan tanta desgracia. Y como estamos en la India, los elefantes jugarán un papel fundamental en las labores de reconstrucción.



¿PESTE O CÓLERA?


Como cabría esperar, con la contaminación de las aguas pronto hacen su aparición las plagas. El mayor Safti recibe la noticia de la aparición de varios casos de peste. Una vez más, como en otras etapas de la historia, el fuego es empleado como elemento esencial para combatir esta enfermedad. Los barrios contaminados son dinamitados, incendiados y demolidos.

Personalmente creo que la epidemia que se desata en Ranchipur no es de peste, sino de cólera. Para ello me baso en la escena del contagio sufrido por Edwina al beber involuntariamente agua por el mismo vaso que un afectado. Sabemos que la mayoría de los casos de peste se producen a partir de la picadura de las pulgas de determinados roedores. Sin embargo, el cólera se propaga rápidamente a partir de aguas contaminadas, siendo la potabilización una medida capital para combatir su diseminación.

Para estar cerca de su amado Safti, Edwina se había ofrecido como voluntaria para trabajar dentro del hospital. Allí, el número de víctimas crecía cada día, y en la mayoría de las ocasiones, el consuelo representaba la única medida terapéutica disponible.

Sin embargo, la enfermedad debuta en Edwina con fiebre elevada, poco característica en el cólera. De la típica afectación intestinal, ni rastro. Finalmente la mujer fallecerá siendo redimida gracias al altruismo de sus últimos días. Su amado Safti abandonará la práctica de la medicina para convertirse en el nuevo Maharajah de Ranchipur (¡a buen seguro un trabajo más considerado y mucho mejor remunerado!)



LAS LLUVIAS DE RANCHIPUR




La mayoría de las críticas que he leido sobre "Las lluvias de Ranchipur" (Jean Negulesco, 1955) remake de la obra que hoy nos ha ocupado, coinciden en situarla en peldaños inferiores en la escala de méritos cinematográficos, y todo ello a pesar de su director y del notable atractivo de su pareja protagonista, Lana Turner como Edwina y Richard Burton como Safti.

NOTA: los fans de Tyrone Power pueden consultar una detallada filmografía suya en:

3 comentarios:

Cinéfilo dijo...

Te sigo habitualmente (de hecho estoy suscrito a este blog). Y vengo de ver "Siete almas". Me gustaría oír una opinión médica sobre un donante como este.
Un saludo.

DOCTOR ALBEIROS dijo...

Aún no he visto la película, tan solo algun trailer...; pero prometo ponerme manos a la obra. Gracias por tu sugerencia.

david rojas dijo...

En la novela, antes del terremoto aparecen casos de peste; cuando sucede el terremoto y la inundación los casos desaparecen (la explicación es que las ratas se murieron ahogadas) pero aparecen casos de cólera y fiebre tifoidea. Esta última enfermedad es la que contrae Lady Esketh al beber del mismo vaso que una paciente.

Gracias por el blog!