- "¡Hey, Chico! Me gustan realmente los colores de los peces luchadores.
- ¿Los colores?
- Los colores son geniales.
- Ajá. Me da un poco de pena no poder ver los colores.
- Nunca pensé que lamentaras nada..."
Rusty James (Matt Dillon) y El Chico de la Moto (Mickey Rourke) en "La ley de la calle" (Francis Ford Coppola, 1982)
Después de mucho tiempo, demasiado quizás, hoy nos aproximamos a un film icónico de los 80, una película de autor en blanco y negro, poseedora de un amplio abanico de estímulos que en nuestra modesta opinión, han ido potenciando su valor cinematográfico con el paso del tiempo.
Hemos de confesar nuestra evidente devoción por la cinematografía de Francis Ford Coppola, con sus luces y sus sombras. Bastaría tan solo para ello inclinarnos ante cintas tan colosalmente esenciales como la trilogía de "El padrino" (1972), "El padrino II" (1974), "El padrino III" (1990) y "Apocalypse Now" (1979).
En 1983 dirigió dos de sus películas quizás más personales y arriesgadas, inspiradas en novelas de Susan Eloise Hinton (1948), escritora estadounidense autora de obras infantiles y juveniles. Natural de Tulsa (Oklahoma) ambientó sus novelas "Rebeldes" (1966) y "La ley de la calle" (1975) en los suburbios de esta ciudad del Medio Oeste donde pandillas de jóvenes desarraigados titubean entre la delincuencia y la redención. Con el debido respeto, un tenaz grupo de rebeldes con causa.
Quizás influenciado por el cine de Orson Wells y Nicholas Ray, empleando elementos oníricos, psicoanalíticos y recursos cinematográficos de corte ciertamente experimental, pero que a su vez nos recuerdan a los grandes clásicos del cine negro: el encuadre de los planos y sus intensos contrastes entre luces y sombras, producto de la magistral dirección de fotografía a cargo de Stephen H. Burum, junto a las influencias del cine de la Nouvelle Vague y del Expresionismo Alemán, contribuyen a engrandecer todavía más si cabe esta película de culto, a pesar de su estrepitoso fracaso inicial en las taquillas comerciales.
Sobre "La ley de la calle", el propio director comentó en su día: "quería hacer una película anarquista sobre la juventud... El Chico de la Moto es como un personaje de Tennessee Williams o Carson McCullers, una especie de rata incapaz de hallar su escapatoria"... En otras palabras, rodó esta película en lo que para él mismo era el momento de máxima plenitud de su carrera.
La lectura de la novela de S.E. Hinton le recordó el cuento de J.D. Salinger "Un día perfecto para el pez plátano", donde uno de los personajes confunde los colores azul y amarillo...
En ambas películas, Coppola brindó su primera oportunidad a un grupo de prometedores jóvenes actores y actrices, pronto catapultados a las cumbres de la fama y el éxito. Estamos hablando del "brak-pack" o "el hatajo de mocosos": Tom Cruise, Matt Dillon, C. Thomas Howell, Patrick Swayze, Ralph Macchio, Rob Lowe, Emilio Estévez, su propio sobrino Nicholas Cage, Chris Penn, Mickey Rourke y la fascinante Diane Lane.
En "La Ley de la calle" destacan las interpretaciones de Matt Dillon como el indómito Rusty-James, y Diane Lane como la tentadora Patty, ambos con una mayoría de edad apenas estrenada, pero sobre todo Mickey Rourke encarnando al legendario Chico de la Moto, tal vez una de las mejores interpretaciones de su carrera profesional.
En el elenco participaron también Nicholas Cage, como Smokey, Vincent Spano como Steve, Laurence Fishburne como Midget, y el polifacético Tom Waits como Benny, el dueño de los billares donde se reúnen los pandilleros.
Mickey Rourke
Precisamente el daltonismo, la patología que padece el Chico cie la Moto es el propósito de estas consideraciones médico-cinéfilas. Por alguna razón decidió Coppola filmar esta película en blanco y negro.
El epílogo de "La ley de la calle", con la silueta de Rusty James ante el océano con la moto que había pertenecido a su hermano, parece un homenaje a "Quadrophenia" (Franc Roddam, 1979), cuando Jimmy (Phil Daniels), rompiendo con todo lo que hasta ahora había sido, despeñaba al mar desde un acantilado la Vespa tuneada del As de Oros (Sting).
En Cahiers du cinéma, Serge Daney, el influyente crítico de cine francés, entiende "La ley de la calle" como la historia de una desilusión. La frustración de Rusty James es idéntica a la de Jimmy cuando descubrió que el idolatrado líder de los mods era el simple botones de un hotel, o a la del capitán Willard (Martin Sheen) al contactar finalmente con el mítico coronel Kurtz (Marlon Brando) en su feudo guarida, oculto entre la más profunda espesura selvática camboyana.
LA NOVELA DE S. E. HINTON
Escrita en 1975, presenta ciertas diferencias con le película, pues la escritora concibió a unos personajes que cuentan con 14 años de edad (Rusty James, Steve, Smokey, Patty), demasiado precoces para las peripecias que transcurren en la película. De la misma manera, en el texto original el Chico de la Moto tampoco alcanzaría la mayoría de edad.
El título original "Rumble fish" hace referencia a los peces luchadores (Betta splendens), una metáfora de los jóvenes protagonistas, inmersos en una lucha constante contra los demás, la sociedad e incluso contra consigo mismos.
Conocidos también como combatientes de Siam, originarios de Vietnam y Tailandia, estos peces son habituales en los acuarios de las tiendas de mascotas. De unos 7 cm de longitud, existen ejemplares de colores rojo, azul, negro y blanco.
Debido a su territorialidad, nunca pueden convivir varios machos en una misma pecera, pues enseguida batallan entre sí; incluso son capaces, como se nos muestra en la película, de atacar a su propio reflejo en un espejo.
CINEFILIA
"La ley de la calle" ha tenido una enorme influencia en la cinematografía de otros prestigiosos directores como por ejemplo Gus Van Sant (1952), especialmente en sus primeras películas (algunas comentadas anteriormente en este mismo blog): su ópera prima "Mala noche" (1985), asimismo rodada en blanco y negro, en "Drugstore Cowboy" (1989), donde Matt Dillon se convierte en Bob Hughes, el líder de una banda de toxicómanos que recorre los Estados Unidos atracando farmacias, pero también en la mítica "Mi Idaho privado" (1991), donde el malogrado River Phoenix y Keanu Reeves encarnaban a Mike Waters, enfermo con narcolepsia, y a Scott Favor, dos jóvenes chaperos que vagan por las calles de Portland.
JOHN DALTON
Fue un destacado naturalista, meteorólogo, matemático y químico británico, descubridor del modelo atómico y su tabla de pesos relativos de los elementos. Además de su erudición, se le conoce como el primer científico en describir el daltonismo, trastorno de la visión que él mismo padecía.
John Dalton (1766-1844)
DALTONISMO
Antes de nada recomendamos leer la reciente entrada "Daltonismo: la solución está en el morado y el naranja" de Lluís Montoliu (14 de noviembre de 2021) en "Gen-Ética" (Blogs Naukas), porque no todas las personas somos capaces de percibir los colores de la misma manera. En líneas generales, el daltonismo se define por la incapacidad de ver normalmente determinados colores y por tanto distinguirlos.
Nuestra retina dispone de dos tipos de neuronas especializadas (fotorreceptores), conocidas como bastones y conos, que en su interior portan una proteínas llamadas opsinas, sensibles a la luz y capaces de reaccionar ante diferentes longitudes de ondas lumínicas.
Los conos detectan los colores y se concentran especialmente en el centro de la visión. Según el tipo de opsinas que contengan existen 3 tipos de conos, que reaccionan ante la luz verde, roja y azul.
Estos fotorreceptores transducen la luz percibida en un estímulo eléctrico que trasmiten a otras neuronas de la retina. Desde allí alcanzan los núcleos visuales cerebrales que interpretan estas señales como imágenes en color.
No todos los daltonismos son iguales. En cifras globales, se estima que el daltonismo puede afectar al 7% de los varones y al 0.4% de las mujeres.
Las personas que tienen afectados los conos verdes padecen deuteranopia, que afecta a un 6% de los varones y a un 0.4% de las mujeres.
La protanopia se detecta en las personas con alteraciones en sus conos rojos (1% de los varones y 0.01% de las mujeres).
Cuando no funcionan los conos azules aparece la tritanopia, trastorno muy poco frecuente y que afecta por igual a hombres y mujeres (0.01%).
Por último, se denomina acromatopsia a la incapacidad de percibir los colores. Se trata de una alteración genética extremadamente rara, que puede afectar de 1 a 9 de cada 100000 personas, relacionada con la afectación de los tres tipos de conos. Normalmente se ha descrito asociada a:
- Visión deficiente.
- Sensibilidad a la luz.
- Nistagmo (movimientos oculares rápidos e involuntarios)
- Ambliopía u ojo vago.
CAUSAS DEL DALTONISMO
El cromosoma X contiene los genes codificadores de las opsinas L (OPN1LW) y M (OPN1MW), mientras que los genes que codifican la opsina S (OPN1SW) se encuentran en el cromosoma 7.
Como los hombres poseen el par cromosómico 23 (XY), presentan con mayor frecuencia alteraciones en las opsinas M (deuteranopia) y S (protanopia), mientras que una mujer, para ser daltónica, tiene que tener afectados ambos cromosomas (XX).
Por ello, los defectos genéticos ligados a la opsina S (tritanopia), al no estar asociados al par 23, no presentan diferencias entre ambos sexos.
La mayoría de las personas daltónicas lo son de nacimiento (afección congénita). Mayoritariamente suelen heredarse desde madres enfermas o portadoras a sus hijos varones.
La aparición más tardía de este trastorno suele ir asociada a:
- Enfermedades: como por ejemplo el glaucoma, la diabetes, la degeneración macular, la enfermedad de Alzheimer, la enfermedad de Parkinson, el alcoholismo crónico, la leucemia o la anemia falciforme.
- Enfermedades vasculares.
- Traumatismos craneoencefálicos.
- Tóxicos y fármacos, como la hidroxicloroquina, empleada para tratar la artritis reumatoide, y recientemente empleada de manera empírica para el tratamiento de la Covid-19, con resultados muy poco concluyentes.
John Dalton nació en el seno de una familia cuáquera, una comunidad religiosa disidente de origen cristiano protestante fundada en Inglaterra por George Fox (1624-1691), caracterizada por la defensa del pacifismo y unos de los primeros en rechazar la esclavitud en los Estados Unidos.
En relación la medicina, cuáqueros famosos han sido Thomas Hodgkin (1798-1866), el médico británico que describió por primera vez la enfermedad de Hodgkin, así como el eminente cirujano Joseph Lister (1827-1912), el padre de la asepsia.
DALTÓNICOS DE CINE
Dicen que el gran Bing Crosby , polifacético cantante y actor fallecido en 1977 en La Moraleja (Madrid), confundía el azul con el verde y viceversa.
Bing Crosby (1903-1977)
Otro secreto a voces: una de las miradas azules más seductoras de Hollywood pertenecía a un daltónico. Dicen que Paul Newman no pudo alistarse en la Armada de los Estados Unidos por su incapacidad para diferenciar algunos colores. Lo cierto es que en la realidad cumplió su servicio militar durante la Segunda Guerra Mundial en la Marina, destinado en las bases de Guam y Okinawa.Paul Newman (1925-2008)
El daltonismo no le impidió desarrollar una excepcional carrera como actor, además de competir como piloto de automovilismo.Los Países Bajos fueron la cuna de Rutger Hauer, el rubio actor indefectiblemente asociado al replicante Roy Batty de "Blade Runner" (Ridley Scott, 1982). Siguiendo el ejemplo de su abuelo, quiso alistarse en la marina, pero no pudo debido a su incapacidad para distinguir ciertos colores, heredada al parecer de uno de sus bisabuelos.
Keanu Reeves siempre ha intentando guardar la máxima discreción en su vida personal, evitando algunos detalles trascendentes para la opinión pública. Aún así, parece ser que el legendario protagonista de la saga de "Matrix" podría padecer algún tipo de daltonismo.
Eddie Redmayne, el exitoso protagonista de "La teoría del todo" (James Marsh, 2015) y "La chica danesa" (Tom Cooper, 2015) es daltónico, teniendo dificultad para diferenciar entre el rojo y el verde.
Por último, el director Christopher Nolan, no llegando a sufrir un daltonismo muy pronunciado, presenta ciertas dificultades para distinguir los colores verde y rojo.
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